La improvisación juega un rol muy importante en la interpretación de la música clásica de la India y se pone un gran énfasis en la creatividad y sensibilidad del solista. La interpretación de un raga pasa por etapas bien definidas, comenzando por un preludio melódico improvisado, seguido por una pieza compuesta y al ritmo del un taal. No hay duración prefijada para la interpretación.
Otra característica importante de la improvisación en la música clásica de la India es la aceleración gradual del tempo, que culmina en un climax final. La prioridad en la música indostánica es el máximo desarrollo de un material mínimo, por lo cual un músico necesita conocer unos pocos ragas en profundidad antes que muchos pero de modo superficial.
Dentro de cada raga, el énfasis está puesto en el lento desdoblamiento de sus sutilezas melódicas, nota por nota, en la larga exposición improvisada conocida como alaap. Deben respetarse escrupulosamente las reglas del raga para que éste produzca en la audiencia el sentimiento correcto, pero también para evitar confundirlo con otros ragas similares. Estas reglas incluyen sostener las notas con la entonación correcta, adornando unas notas de acuerdo a lo prescrito, enfatizando otras, realizando los ascensos y descensos de secuencias de las escalas del raga correctamente y asegurando que el raga elegido sea apropiado para ese momento del día o de la noche. El desarrollo del raga continúa normalmente con una o más composiciones en diferentes ciclos rítmicos.